“Lo he llenado del Espíritu de Dios… en todo arte” (Éxodo 31:3).
“Lo he llenado del Espíritu de Dios… en todo arte” (Éxodo 31:3).
“Aquel… predica la fe que en otro tiempo asolaba” (Gálatas 1:23).
“…y hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones” (Efesios 5:19).
“Si oyeres que se dice… tú inquirirás, y buscarás y preguntarás con diligencia; y si pareciere verdad, cosa cierta…” (Deuteronomio 13:12,14).
“Pero tuvimos en nosotros mismos sentencia de muerte, para que no confiásemos en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos” (2 Corintios 1:9).
“Así ha dicho Jehová: Reprime del llanto tu voz, y de las lágrimas tus ojos; porque salario hay para tu trabajo, dice Jehová, y volverán de la tierra del enemigo” (Jeremías 31:16).
“Porque dos males ha hecho mi pueblo: me dejaron a mí, fuente de agua viva, y cavaron para sí cisternas, cisternas rotas que no retienen agua” (Jeremías 2:13).
“No me toques, porque aún no he subido a mi Padre” (Juan 20:17).
“…prefiero hablar cinco palabras con mi entendimiento, para enseñar también a otros, que diez mil palabras en lengua desconocida” (1 Corintios 14:19).
“Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque, ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina?” (Hebreos 12:7).